Para que la producción agrícola sea fuerte y saludable, necesitamos un terreno con los nutrientes necesarios, que permita conservar la salud de todo el ecosistema.
Desde Orang Growth vamos a hablarte de cómo mejorar la fertilidad del suelo siguiendo una serie de técnicas y estrategias.
Materia Orgánica
Si queremos enriquecer el suelo, mejorar su estructura y que retenga más cantidad de agua y nutrientes, necesitamos materia orgánica. Vamos a ver qué formas tienes de agregarla a tu terreno:
- Compost: Una de las formas más efectivas que tenemos de aportar materia orgánica. El compost tiene nutrientes esenciales y aumenta la capacidad del suelo para retener la humedad.
- Estiércol: El estiércol compostado es un método excelente para mejorar la fertilidad del suelo, ya que proporciona nitrógeno, fósforo y potasio.
Rotación de Cultivos
Es una de las técnicas con más usos, y es que aire el suelo e impide la proliferación de muchos hongos. Además de esto, nos ayudará a evitar la sobreexplotación de algunos nutrientes.
- Leguminosas: Las leguminosas, como el trébol o alfalfa, enriquecen el suelo con nitrógeno, esencial para las plantas.
- Diversidad de cultivos: La rotación de algunos cultivos como cereales y tubérculos es especialmente beneficiosa para reducir la erosión del suelo y mejorar su estructura.
Fertilizantes Naturales y Enmiendas
Los fertilizantes naturales y las enmiendas minerales nos permiten mejorar la fertilidad del terreno de forma sostenible. Si quieres saber cómo mejorar la fertilidad del suelo, estos son algunos productos recomendables para ello:
- Fosfatos naturales: El fósforo es esencial para el crecimiento de las raíces y el desarrollo de las flores.
- Cal agrícola: Con ella corregimos la acidez del suelo, y mejoramos la disponibilidad de ciertos nutrientes.
- Silicatos: Fortalecen las paredes celulares de las plantas y aumentan la resistencia a enfermedades y estrés.
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Labranza Reducida
Cuando labramos frecuentemente podemos degradar la estructura del suelo, lo que termina convirtiéndose en una menor capacidad para retener nutrientes y agua. Con la técnica de labranza reducida o mínima, preservamos la capa superior del suelo, y ayudamos a que proliferen los organismos beneficiosos para la estructura natural del terreno.
Cultivo de Cobertura
Esta técnica consiste en sembrar determinadas plantas, no con el objetivo de cosecharlas, sino para que protejan el suelo y lo enriquezcan. Por tanto, son plantas que se quedarán en el suelo, y se dejarán morir de forma natural mientras van haciendo su función de cobertura.
Son cultivos de cobertura las leguminosas, el trébol o el centeno.
Microorganismos Beneficiosos
Determinados hongos y bacterias pueden resultar beneficiosos para el suelo, ayudando a descomponer la materia orgánica y a transformar los nutrientes para que las plantas los absorban después. Nos referimos a:
- Micorrizas: Hongos que mejoran la absorción de fósforo y otros nutrientes.
- Bacterias del género Rhizobium, Azotobacter y Azospirillium: Ayudan a fijar el nitrógeno atmosférico en el suelo, poniéndolo a disposición de las plantas.
Manejo pH del Suelo
El nivel de acidez puede afectar a la disponibilidad de los nutrientes, bloqueando ciertos elementos. Podemos manejar el pH mediante:
- Cal: Eleva el pH en suelos ácidos (los alcaliniza), facilitando la absorción de nutrientes.
- Azufre elemental: Al contrario del caso anterior, aumenta la acidez de suelos alcalinos para mejorar la fertilidad.
Mejorar la fertilidad del suelo es un proceso continuo en el que hemos de trabajar mediante prácticas sostenibles, enmiendas naturales y ayudándonos de determinados productos. Si quieres aumentar la fertilidad de tu terreno mediante productos 100% naturales, visita nuestra sección de ecológicos-bio.
